6 - Walls.
La desesperación que sentía en aquel momento empezaba a ser impredecible y bastante alta, quería acostarme con él, lo deseaba como hacía tiempo que no deseaba algo.
Mis manos se aferraron a los cuellos de su camisa y mi respiración creció hasta tal punto que ambos tuvimos que detenernos para coger aire.
- ¿Quieres que subamos? – preguntó, como si le diese miedo decirlo abiertamente, quizás le daba miedo mi reacción. Negué con la cabeza, haciendo que él me mirase sin comprender.
- Alfonso y Marta están arriba – declaré, haciendo que él maldijese y yo comenzase a reír, divertida.
- ¿Te hace gracia? – preguntó, acortando las distancias entre ambos, acariciando su boca con la mía, sin besarme aún.