Mi querida enemiga. Capítulo 15: Una noticia sorpresiva.
Foster Lewis
Salí de allí lleno de una profunda tristeza, porque en ese momento debí ser más cerebral y menos impulsivo, no me sorprendería que la madre de Callia haya propiciado esa situación, ella me odiaba y solo conspirando entre su hija y yo para que nos peleáramos y desconfiáramos el uno del otro podía separarnos.
—¡Vieja miserable! ¿Cómo pudo hacerle esto a su propia hija, a su nieto? Es que ni siquiera los animales tratan de esa manera a sus crías —expresé en voz alta mientras caminaba al auto.
Su madre era la única que estaba cerca de Callia y que pudo haberle dado a tomar esos medicamentos sin que sospechara porque confiaba en ella.
Sé que ella no estaba, sé que ahora amaba a Harley, pero no podía dejar de afectarme lo ocurrido en el pasado, porque de haber tenido la astucia de sospechar esa verdad a tiempo, hubiese sido la diferencia entre la vida o la muerte de la mujer que amé y que siempre iba a guardar en mi corazón.
Los recuerdos de lo que le hice ese día, cuando