Entre a la oficina de Andrew y trate de no mirar a Ricardo, recuerdo lo sucedido de anoche y no es nada agradable para mí, además de que no lo considero una persona honorable, el sabe bien que soy una mujer casada y aun así se atrevió a besarme y sin mi consentimiento.
—Buenos días. —le dije para no ser descortés.
—Buenos días. —ambos contestaron.
—Andrew cariño me gustaría saber si almorzaremos juntos hoy.
—Si claro, disculpa que no te había respondido estaba ocupado.
—No hay problema, entonces te esperare en mi oficina a que vallas a recogerme.
—Ok.
No continue en la oficina y me fui, me sentía incomoda estando ahí con Ricardo.
Regrese a mi oficina y a prepararme para cuando Andrew me viniera a recoger.
Andrew.