Me encontraba admirando el bufete, era muy díficil escoger, todo se miraba delicioso, tenía un plato en mi mano derecha y mi tenedor en la otra, estaba indecisa no sabía por donde empezar; escogí de todo un poco o más bien lo que entró en el plato ¡Si tan solo el plato fuera más grande! Exclamé, me senté en una mesa alejados de todos y me dispuse a degustar cada uno de los manjares quee había servido. Desde no muy lejos observaba a la feliz pareja de recién casados bailando cómodamente regalandose sonrisas a ratos mientras seguía consumiendo mis alimentos, llega mi prima Sheila y se sienta a mi lado.
_¡Prima pero que bonita estás! Dice impresionada.
_¡Gracias! Respondí con la boca llena.
_¡Oye! Y tus modales, además tanto comes te vas a engordar. Me dice mientras toma un vaso de agua.
_Mira como me importa, le dijo llevándome desafiadamamente una cucharada de comida a la boca.
_¡Ash! Contigo no se puede_ Dice algo molesta.
_¿Qué quieres Sheila?
_Solo vine a saludarte ¡Ah! Y ya mirast