La preocupación por su Luna se mezclaba con la urgencia de la tarea que tenía entre manos, sabiendo que cada decisión que tomara afectaría el destino de todos los involucrados.
— ¿Entonces por qué? —preguntó Isis, preocupada. — Se ha presentado un grave problema en la manada —comenzó a explicar el alfa con tranquilidad—. Después de traer a tus padres, tengo que resolverlo. Todo ello va a robarme toda mi energía. No creo que pueda ir a verte hoy, mi Luna. — Cuídate mucho, mi Alfa. No quiero que te pase nada —dijo Isis al escuchar la explicación—. ¿Podemos hablar cuando termines? — No me va a pasar nada, mi Luna, pero estaré muy agotado —le aseguró el alfa, y luego sonrió al escucharla pedir hablar—. Sí, podemos hablar todo lo que quieras. Hasta luego, mi LunaSejmet fue creada por Ra para castigar a los hombres por burlarse de él y por la vejez. Sin embargo, fue tan sanguinaria que, a pesar de haber llevado a cabo una gran matanza, su sed de sangre se mantenía viva y parecía dispuesta a acabar con la humanidad. Entonces, Ra tiñó mucha cerveza con ocre rojo y la derramó por donde vivía ella. Sejmet creyó que era sangre y bebió en gran cantidad; se embriagó tanto que no mató a ningún hombre ese día y regresó con su padre Ra, quien le hizo una gran celebración porque se habían acabado las batallas y la convirtió en diosa del amor, Bastet.— ¿Entonces, quién es Antoni? —preguntó Netfis.— Por lo que puedo sentir, ella tiene de las dos —el Alfa se giró hacia Netfis de nuevo y preguntó—: Dime, Netfis, ¿alguna vez viste a Antoni molesta?&mda
Merynert y Héctor se transforman al escuchar la petición del alfa Amat, convirtiéndose en lobos frente a la luna Amaral, que observa asombrada lo imponentes que son ambos. —¡Oh, pero qué grandes y hermosos son ahora, cariño, y tú, Merynert, eres preciosa! —exclama mientras acaricia a ambos lobos en la cabeza. Ambos jóvenes mueven la cola y regresan a su forma humana, abrazándola al mismo tiempo. Al separarse, ella brilla de felicidad y ha olvidado cualquier molestia. —¡Vamos a preparar una comida en familia esta noche, y no quiero excusas! —anuncia en voz alta, como si estuviera ordenando a todos. —También se quedarán aquí Netfis y Bennu. —Cariño, hay otras cosas importantes que debo discutir con toda la manada —intenta detenerla el alfa Amat. Amat sabía que no sería sencill
El ambiente se tornaba aún más denso con cada palabra de Manuel. Era como si una pesada niebla se estuviera extendiendo sobre todos los presentes, envolviéndolos en una marea de desconfianza y cuestionamientos velados. Sin embargo, ante el tumulto y la espuma agitada de la discordia, los ojos de Amat se mantenían fijos y penetrantes en los integrantes de su manada.En ese instante, Merytnert se adelantó una vez más y, con un gesto delicado pero decidido, alzó la mano. La habitación pareció aquietarse bajo su influencia; los murmullos disminuyeron hasta convertirse en un silencio expectante. —Mi hermano no desconfía de ustedes, ni tampoco lo hago yo —dijo con firmeza—. Bennu y Netfis se aseguraron de que yo llegara aquí sana y salva, por eso han estado conmigo. Pero ahora, su confianza está en cada uno de ustedes, en nuestra capacidad de protegernos los u
El alfa Amat asiente con aprobación, y una renovada determinación se refleja al mirar con orgullo a su hijo Héctor, quien, a pesar de su gran poder, lo ha obedecido. El alfa Supremo los observa al ver que Héctor ha logrado controlarse mejor. —Es que mi lobo todavía escucha la voz de alfa de mi padre —explica ante su mirada. —Bueno, ya estoy aquí —dice el alfa Supremo, consciente de que debe intervenir en la situación presente—. Alfa Amat, ¿me puedes explicar qué es todo esto? —Mi alfa —Amat se inclina ante el alfa Supremo—. Es que a los miembros de mi manada no les gustó que nuestro Héctor se casara sin nuestro conocimiento. —¿Les explicaste los motivos? —No he tenido tiempo —niega el alfa, inclinando la cabeza—. Traté de hacerlo, pero creo que no interpretaron bi
Héctor se convierte en Anker, que gira, mirando a todos los miembros de su manada con furia. Netfis y Bennu también han tomado la forma de lobos, al igual que el alfa Amat. Anker mira a Bennu y, de pronto, desata una tormenta de rayos y centellas que va aumentando en intensidad. Bennu interpone su poder del fuego para detener los ataques, y Netfis también desvía la energía. El alfa Amat ruge con su voz de alfa. Anker se detiene y agacha la cabeza. En ese momento, todos vuelven a ser humanos.—¿Alguno de ustedes se imaginó siquiera poseer el poder que tienen los de esa manada? —pregunta Noel—. No sé qué decidirán los antiguos y ustedes, pero yo seguiré siendo el beta del alfa Amat, donde quiera que él vaya, y mi hijo seguirá a su alfa, adonde quiera que él decida estar. Él ha decidido unirse a La Maat Ra. ¡Nosotros le seguiremos! ¡Porque yo quier
Isis estaba muy feliz porque sus padres habían vuelto. Practicaba mucho para lograr controlar a Ast, su loba interior, quien la ayudaba enormemente. Juntas habían explorado todas sus memorias desde que su padre las bloqueó, para que Isis pudiera ver cuánto habían crecido. A veces, Ast se sentía triste y otras, feliz. Isis comprendía que eran dos almas en un solo cuerpo que se iba transformando. Además, estaba contenta porque las cosas con su Alfa iban muy bien. Sin embargo, últimamente él estaba tan ocupado que apenas podían hablar, lo que no le gustaba nada. Desde que le había permitido tocarla de esa manera, Isis empezaba a sentir que su Alfa se estaba alejando.Aquella mañana, sus padres vinieron a visitarla. Se estaban quedando en casa de Jacking. A pesar de lo buena persona que era, a Isis ya no le emocionaba hablar de él. Se había enamorado completamente de su Alfa Sup
Mientras regresaba a su forma original, Isis sintió una mezcla de alivio y frustración. La transformación no era fácil, pero cada intento que hacía la acercaba más a su destino junto a su Alfa. Mat la observaba con infinita paciencia, consciente de que el camino no era sencillo, pero a su lado, Isis tenía la certeza de que cualquier desafío podría enfrentarse con valor y amor.— Lo has hecho muy bien, mi Luna —dijo Mat mientras caminaba hacia su lado—. Quiero hablarte de algo muy importante. Ya casi dominas tu forma de ser como loba Ast. Pero sabes que, para convertirte en tu cuerpo real de humana, ¡el Alfa Supremo tiene que marcarte, y yo debo marcar a Ast!— ¿Te refieres a la marca que me explicó mi Alfa el otro día? —preguntó Isis, interesada en el asunto, cansada de habitar solo en sus memorias.— Sí, mi Luna, a esa misma &mda
Sabía que sus presentimientos no eran falsos; los vampiros habían logrado localizar sus manadas y habían empleado hechizos que hacían aparecer sus fronteras. Al final, la manada Luna Nueva aceptó integrarse a la suya. Aunque los antiguos se rehusaron al principio, la mayoría decidió unirse a ellos.Realizaron la ceremonia de juramento y otorgaron poderes a todos los miembros. Las mujeres fueron las más decididas; se unieron al batallón de su hermana, que ya dominaba sus habilidades. Los hombres, inicialmente reticentes a entrenar al lado de ellas bajo la dirección de Héctor, se entusiasmaron al presenciar las batallas que llevaban a cabo Merytnert y Héctor durante el entrenamiento, y ahora entrenaban juntos con gran fervor.La manada de hombres del padre de su Luna también se incorporó a ellos. ¡Era un increíble batallón mortífero, lleno de poderes!