Un mes después.
Evangelyn cuidaba a su madre, ella estaba por salir al fin del hospital.
Marcus entró, estaba feliz, ayudó a su esposa a salir de la habitación, ella iba despacio, debían ir al auto, e ir a casa.
Empresa Ford.
Bennett estaba en la oficina, debía acabar de revisar esos reportes y salir para ir a casa, su madre hoy volvía, estaba feliz.
Pero, incluso eso le sabía agridulce, no podía olvidar la traición y el odio que crecía en su interior.
Margaret llegó a la oficina, tenía mucho miedo, pero se atrevió a entrar, se sorprendió de que nadie le impidiera la entrada, supo enseguida que era probable que Bennett no creyera que ella lo vendría a buscar.
Estuvo a punto de arrepentirse, pero tocò su vientre, sintió la fortaleza para ir a buscarlo.
«Èl debe saber que será papá, no puedo negarle mi hijo a su padre»
Margaret subió al elevador, su corazón temblaba, igual que su cuerpo.
Al abrirse la puerta del elevador, ella observó que la secretaria ya se había marchado, apr