Violet
Kale me mira expectante a mi respuesta.
— No. — respondo haciendo que el semblante de su rostro decaiga notablemente.
— ¿No? ¿Quieres que me vaya? — pregunta mirándome dolido.
Ruedo los ojos con exasperación.
— Sí, quiero que te vayas porque llevas un mes aquí y tú Manada esta allá sola, desprotegida — cuestiono con el ceño fruncido.
— Vine porque ambos nos debilitamos sin la presencia del otro. — dice sin dejar de mirarme.
— Si, solo que por alguna razón tú estabas intacto, la única afectada fui yo, te pido que te vayas a hacerte cargo de tu manada. — le pido preocupada, si llega a haber un ataque todos están frágiles sin su Alfa.
—