18

—Puedo decir lo mismo, mi querido Sebastián —hablé con ciertas intenciones y él capto inmediatamente cuáles eran—. Pero mis secretos nunca serán tan mordaces como los tuyos.

—¿Qué se supone que está pasando aquí? —interviene en una cuestionante Thiago, mirándonos por intervalos.

Se encuentra ofuscado en la ignorancia, es comprensible, ¿pero es adecuado que sea yo quien lo ponga en contexto de lo que está pasando? Al final del día, no soy tan maldita y la vergüenza en este momento no solo me pertenece a mí.

—No tengo tiempo para esto, vamos, Neferet, hablemos afuera —dicho esto, tomó mi mano con intención de guiarme a su antojo. No lo permití.

—¿Quién te crees? —interpelé con el ceño fruncido y una mirada mordaz, agria, mientras a la vez, me solté con acritud—, ¿por qué te permites tocarme?, ¿con qué derecho?

—Neferet… —dijo mi nombre como un tipo de advertencia, elevé ambas cejas y le dediqué una sonrisa de lado.

—¿Te atreves? —cuestioné, entre tanto di un suspiro al viento en ca
Capítulos gratis disponibles en la App >
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo