—Los días pasaron, y lo que se retrasó llego. Los hermanos de Oscar venían a visitarnos, querían conocer a la niña y por supuesto matarme a mi o mejor dicho cerciorarse que era verdad
—Es hermosa Oscar, es una muñeca
—Te luciste con ella hermano, lo bueno es que se parece a la mamá y no a ti
—Es bueno que estén aquí ¿Cómo estuvo el viaje?
—Pesado, pero nada que no se pueda soportar ¿Verdad Mafer?
—Asi es Aarón, era más la emoción de conocer a la nena y volver a ver a la señorita Swan
—Sonreí un tanto incomoda, ya no me gustaba que me llamaran por ese apellido
—¡Lindsay! ¿Puede seguirte diciendo asi?
—Claro Aarón
—Compórtate Aarón, recuerda que es tu cuñada y la madre de tu sobrina
—No me lo tienes que recordar Oscar
—¿Cómo se encuentra señorita Swan?
—Dime Lindsay o Lind como mis amigos me dice
—Está bien, Lindsay necesito aclarar un poco las cosas, hasta hace poco mi hermano estaba comprometida con una ex compañera de la universidad y luego usted apareció con un bebé y todo se revo