Pensando en ello, a Kevin le entraron ganas de cotillear, pero viendo que Carolina y el mayordomo estaban allí, no le pareció buena idea hablar del tema, así que se calló.
Logan y Hugo tenían cosas importantes que hacer y no se quedaron mucho en la sala de Esperanza.
Sin embargo, era cierto que hacía tiempo que no comían juntos.
Antes de marcharse, Kevin dijo: —Si pueden sacar tiempo, ¿por qué no nos reunimos todos esta noche?
Logan y Hugo hablaron al unísono: —Claro.
Logan tuvo un día completo de trabajo en el hospital, y por la tarde, cuando Sara vino a recoger su turno, se dirigió al restaurante que Kevin había reservado.
Carolina volvió a la casa de los Estrella al mediodía.
Así que, por la tarde, Logan fue solo al restaurante.
Hugo y Kevin ya estaban allí cuando llegó.
Natalia fue la última en llegar.
Cuando entró en el reservado, Logan miró de reojo y fue el primero en hablar: —¿Estás aquí?
Natalia sonrió: —Sí.
Mientras tanto ambién vio a Hugo a un lado.
Al principio, se sorprend