A pesar de que Lucy había estado llorando las últimas horas desde la reunión de la manada hasta ahora, aún se veía hermosa. Sí, tenía algo de maquillaje corrido debajo de los ojos, y su cara estaba un poco pálida, pero estaba deslumbrante.
—Por supuesto —le dije.
Se dirigió al baño mientras yo preparaba la sala de estar para una conversación muy necesaria. Aún no estaba segura de dónde estaba parada mi amistad con Lucy, pero por ahora, creo que necesitaba más que nadie a una amiga. Quería llamar a Nan e Irene y decirles lo que estaba pasando, pero eso significaría admitir que estoy embarazada del bebé de Gavin, y prefería saltarme esa parte. Quería hablar con alguien que ya conociera esa parte de la historia, para no tener que repetirla.
No tardó mucho para que Lucy regresara. Su maquillaje estaba arreglado, y su cabello estaba recogido en una coleta baja.
Me dio una pequeña sonrisa cuando me vio sentada en el sofá. Cuando se unió a mí, se volteó para mirarme, poniéndose cómoda.
—Enton