Con una única declaración, redirigió todas las críticas hacia su propia persona.
A pesar de que esta relación reconocida públicamente fuera únicamente resultado de la confusión mental de Gabriel, originada por un malentendido, inevitablemente provocó oleadas de emociones en el interior de Ana.
El salón tenía encendida una iluminación de tono amarillo cálido, más allá del enorme ventanal se extendía una superficie marina sin límites.
Ana se acomodó en la silla suspendida, contemplando esta pantalla durante un tiempo considerable, cuando súbitamente apareció una ventana emergente.
Era el panel administrativo de la plataforma de transmisión.
Al acceder a la sección de mensajes privados, en la parte superior había una cuenta que de manera insistente había enviado más de 99 mensajes.
Ana tenía cierto reconocimiento de este nombre de usuario e imagen de perfil.
Era el principal donante que había enviado numerosos carnavales en su transmisión esa noche.
Considerando que esta persona tenía rec