Capítulo 99. Nueva figura.
Elizabeth, radiante, admira su vestido de novia recién llegado. Abel la observa desde lejos, junto a Priscila, y con desdén exclama:
—¡Hipócrita!
—¿Qué quieres decir? —pregunta Priscila, confusa.
—Nada, cariño. Solo que... Elizabeth siempre ha sido tan... odiosa. Humilla a todo el mundo por ser de la realeza.
—Tienes razón. A veces es insoportable.
—Pero bueno, algún día le llegará su merecido —finge Abel una sonrisa y se marcha, dejando a Priscila mirando de reojo el vestido de Elizabeth.
—¿Qué le habrá pasado a Abel? Últimamente está actuando de manera muy rara —murmuró para sí misma.
Priscila se acerca rápidamente al vestido de novia de Elizabeth, maravillada. Con la intención de tocarlo.
—¡Es precioso, Elizabeth!
Elizabeth aparta la mano de Priscila con desdén.
—¡Cuidado! Es un vestido muy fino y caro. No quiero que lo ensucies.
Priscila, sorprendida y un poco dolida, la retira.
—Lo siento —se disculpa.
Elizabeth la mira de reojo con una sonrisa maliciosa y se dirige a su sirvient