“¡¡¡NO TE ATREVAS A TOCARME!!!!”
Las palabras le dolieron más que una picadura de abeja. Le recordaron cómo Amelia le habló la noche en que ella y su hijo murieron: lo descuidó, le reveló su odio, y ahora Ava hacía lo mismo.
“Ava…”
“¿Qué, Lucas? ¿QUÉ? ¿No me has arruinado la vida ya lo suficiente? ¿Por qué no me dejaste en paz desde el principio? Adondequiera que iba, seguías persiguiéndome… Incluso después de que te rechazara… Decidiste no dejarme en paz, y ahora mira lo que ha pasado… Porque no estuve ahí para protegerlo…” SNIFFS, “se ha ido por mi culpa…” gimió, dejando que las lágrimas fluyeran libremente esta vez.
Intentó comunicarse con ella de nuevo. "Ava... Sé que no hablas en serio, sé que es porque estás enojada..."
“Por el amor de la diosa, te lo ruego, Lucas De’ Clan, ¡¡¡aléjate de mí!!!”
El rostro de Lucas, que apenas mostraba expresión alguna, comenzó a mostrar tristeza y dolor, pero esta vez, a Ava no le importó. Tenía razón, no quiso decir nada de lo que dijo; sabía qu