No podía créelo, simplemente no podía, Neus aún en el suelo, se arrastró un poco hacia atrás y lo observó, lo hizo con un gesto lleno de terror, de un terrible temor que la recorría por completo
¿Ahora quién sería la siguiente? ¿Ella? Las lágrimas inundaron sus ojos, el miedo hacía un completo frenesí en ella
No sabía cómo actuar, no sabía qué hacer, pero si sabía que, si corría, Desmon podría solo hace lo mismo que había hecho con aquel hombre
Los ojos de Neus se fueron directamente hacia el hombre tendido sin parte de su cabeza tras Desmon, aquel, la observaba sin perder un solo movimiento de esta
Aquel que parecía un depredador, a punto de dar un salto hacia su presa, no podía, simplemente no podía hacerlo
Debía escapar, debía escapar de aquel hombre, debía hacerlo, llamar a la policía, indicar que el gran empresario Desmon D’angelo, era un asesino, un hombre peligros
Que había asesinado a dos hombres frente a ella, pero antes debía escapar, debía buscar la manera, ella observó de