Gia Cafiori vivió el trauma de perder a su padre frente a sus ojos, creció con su madre quien la sobreprotegía, de un momento a otro su vida dio un giro inesperado, viéndose envuelta en un mundo de y drogas que la perseguirá a donde vaya.
Leer más—Me preguntaba cuándo vendrías, Aaaaahhhh — grita de dolor—Ya viene — dice el doctor — puja con todas tus fuerzasGia toma aire y puja apretando la mano de Adam, él está con los ojos abiertos asustado de pronto escucha un llanto y todo su miedo y preocupación se van, besa una vez más la frente de Gia.—Lo hiciste excelente amor — le dice con ternura—Te amo — le respondeAdam está por responderle y la enfermera se acerca—Felicidades tienen una mujercita — les entrega y se retira—Es mujer…. Una princes
—Ok, pero vamos a otro lado — le sonríe guiñandole un ojo lo toma de la mano y camina con él ingresando a un área de la casa, la pastilla comienza a hacerle efecto, ella lo acomoda en una silla, él solo se deja hacer y se queda dormido al instante.Gia camina hacia la puerta abriéndola, la deja entrecerrada y les envía un mensaje.Ahora su misión es encontrar a Joe, camina y siente que la jalan de la cintura voltea y es él quien la sujeta.—Hola preciosa, ¿Dónde estabas? Que recién te veoGia se asusta teme que la haya reconocido, aunque lleva peluca y lentes de contacto eso la tranquiliza un poco—Te andaba buscando &m
Llegan a una pequeña cabaña parecida al que Joe los tenía amarrados, al ingresar Gia se encuentra con su padre con signos de haber sido golpeado, Gia al verlo corre a abrazarlo.—¿Por qué me mentiste? — le dice reclamándole—Tenías que estar tranquila y no interferir, aparte no era bueno para ti ni él bebe — le dice mientras camina a la ventana para ver si nadie los siguióSu madre sale a su encuentro y también se abrazan—Tenemos que organizarnos, si queremos que Joe nos deje tranquilos debemos acabar con él — dice Giovani serioCamina junto a Adam y Mike hacia un despacho improvisado. Joe ordena a sus hombres, estos nos jalan a mi padre y a mi llevándonos a unas habitaciones detrás de la hacienda un poco alejados del resto.La habitación a la que me meten es un poco oscura, pero al menos tiene una cama decente, el cuerpo me duele, me acuesto un momento quedándome profundamente dormida.Después de unas horas, siento unas manos removerme—Señorita despierta — abro los ojos asustada — tranquila soy un amigo de Adam y Mike—¿Cómo está Adam? ¿Lo has visto? — pregunto desesperada—Él está bien, la bala no lastimo ningún órgano vLARGA ESPERA
Terminamos el desayuno y uno de sus hombres llega a buscarlo.—Ruperto, iremos a conversar a tu despacho que nadie nos molesteRuperto solo asiente mientras Joe camina junto con su hombre al despacho, no entiendo por qué le tiene tanto miedo a Joe, ¿no se supone que el tiene poder e influencia acá? Estamos en su territorio no debería dejarse tratar mal, pero bueno me conviene que le haga caso así no intentara nada extraño conmigo.Después de unos minutos Joe nos llama a mi padre y a mí para que ingresemos al despacho, mis manos me sudan y mi cuerpo tiembla un poco, los típicos malestares del embarazo tampoco me ayudan en este momento.—Muy bien Giovani, encontraron la formula,
—Esta bien Joe tu ganas, te daré la formula, pero debes prometerme que no dejarás que Ruperto le haga daño, y tú tampoco podrás lastimarla.—Ves como ahora nos comprendemos, si tan solo hubieras hecho eso antes, sin hacer la idiotez de avisar a la policía, ¿Dónde está la fórmula?—Está en un almacén a las afueras de la ciudad—Sabía que no te habías deshecho de la fórmulaCuando llegamos a tierra, junto con mi padre les dieron las indicaciones a uno de los hombres de Joe para que vayan a recoger la fórmula.—¿Ya nos dejarás ir?
—No pierdas tu tiempo Sabrina — Adam voltea y me mira, ella se molesta y le agarra la cara con su mano guiándolo para que la vea—Tú eres mío, no permitas que esa tipa nos aleje, éramos felices antes que ella llegue—Antes que ella llegue tú y yo no éramos nada, además sabes muy bien que nunca te quise—Pero bien que disfrutabas cuando te lo hacía — su mano se dirige a agarrarle su miembro, volteo mi mirada y cierro los ojos, no quiero ver a otra mujer tocándolo—Sabrina suéltame, compórtate, ten un poco de dignidad — Adam trata de detenerla—¡Sí, Sabrina por favor!, no seas asq
—Gia por favor, no quiero que nada te pase, allá vas a estar bien, son amigos nuestros, ellos ya saben que vas a ir, te están esperando—¿Y tú?—Yo tengo que quedarme para asegurarme de que ya no podrán molestarte nunca más, por favor vete, yo después iré a buscarteLlegamos al aeropuerto, en el altavoz se escucha el llamado para mi vuelo.Adam me abraza, respondo a su abrazo con fuerza, levanto la vista y nos besamos, pequeñas lágrimas se escapan de mis ojos, nuestro beso es tierno lleno de promesa, sus brazos de Adam me atraen hacia él, ninguno de los dos quiere romper este beso, todas las palabras que dije de terminar en e