El logro de una fiesta en casa...
—¿Por qué no me dijeron para traer un regalo hoy? — preguntó Tomás empezando a subir a su habitación.
— Señor Williams, pensé qué se iba a enojar — exclamó Mariam— como no le gustan las fiestas.
— Aclaró algo, no me gusta que Sara ande en fiestas por allí, pero si se va a hacer acá en casa con los empleados y la familia, podemos celebrar sus quince años— dijo él.
— Entonces, ¿podemos hacerlo nuevamente mañana papá?— preguntó ella— ¿ Me dejas invitar a un par de chicas del colegio?
Él se quedó mirando a su hija y le guiñó un ojo y dijo:
— Si podemos celebrar tu cumpleaños mañana— dijo Tomás— pero sólo dos amigas
— ¿Puedes bailar él vals conmigo?— dijo Sara— ¡Será muy corto!
— ¡Ay señor!— suplicó Mariam— ¡son sus quince años!
— Está bien— dijo cediendo— deja de manipular muchachita.
— ¡Gracias papá! ¿Te gusta mi vestido?— dijo Sara
Ya él sabía perfectamente que su niña, estaba creciendo, estaría pronto en la universidad, y tenía temor, sonrió al imaginar la cara de su hija cuando le