Quería dormir, pero no acudía el sueño, estaba tan cansada ese día, el timbre de su teléfono le saco de sus muchos pensamientos.
-Perdón por la hora, desperté hace un rato y no puedo dormir-
- ¿Jake? -
-Me quede dormido profundamente- El sueño me abandono- ¿Y tú?
-Yo estaba dormida- mintió, bajando la voz simulo cansancio.
-Solo quería escucharte- Debí haberte dado un beso anoche-
-No creo-
-Creo que si-Estoy seguro de que no hubieras objetado nada-
-Bien, Jake debo madrugar muy temprano-
-Yo también- Tengo una idea- Desayunemos juntos-
-No es buena idea- a esa hora ya todos están por aquí levantados-.
-En tu casa no, paso a tu negocio antes que abras, estaré a las ocho de la mañana- No me digas que no puedes, sé que estas a esa hora ahí-. guárdame lo mío `por favor-.
-Jake… No sé, además era a la nueve que…
-Ocho en punto, soy puntual- y añadió- Olvidas que rompo m