Las negras pupilas de Brendan se dilataron mientras el asombro se agitaba en su interior. Mientras tanto, complejos e intrincados sentimientos llenaban su corazón como si acabaran de hacerle un corte.
Había pensado que a ella solo le importaban el libro de música y el piano. Resultó que estaba tan preocupada... ¿Solo por él?
Ella había estado tratando de recuperar el libro de música que él le había regalado y por eso se sentía tan miserable que sollozaba.
Algo pareció golpearle, y Brendan levantó a Deirdre y salió del salón privado.
La puso en el asiento del copiloto. Cuando se abrochó el cinturón de seguridad, miró inconscientemente por el retrovisor y vio un coche detrás de él que le resultaba inexplicablemente familiar.
Tras echar un segundo vistazo, vio la matrícula y un destello de emoción cruzó sus ojos negros y frígidos. Entonces, hizo una llamada.
En un baño situado en la habitación privada de al lado, Charlene estaba escondida, temblando de miedo.
Mientras Vyn le daba u