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Las frecuentes peleas y los gritos de los vecinos de esa casa comenzaron a asustar profundamente a Rosana. A veces corría hacia atrás y se quedaba detrás de un árbol hasta que todos se callaran. ¡Lo cual era raro! Las razones casi siempre se debían a facturas, comida o situaciones que causaban vergüenza a algunos de los hermanos.
__Oí estás haciendo un punto en un pequeño bar cerca de las cataratas, ¡eres ordinario! -acusó a Guideon, una vez, dirigiéndose a Rubia que salía todas las noches sin decir a dónde iba. Dejó a Neto durmiendo