Al terminar, él se recostó a su lado agitado, mientras Rosalía recobraba el sentido, suspiro largo esperando a que su corazón se calmara, palpitaba tan desenfrenadamente, Guillermo la atrajo más a él abrazándola por detrás, ambos se quedaron dormidos.
Mas tarde Rosalía despertó al sentir el movimiento y ruido, Guillermo dejó el teléfono en la cama, terminaba una llamada y estaba vistiéndose, al verla despierta él sonrió robándole un beso rápido. “Me tengo que ir, recogeré a Linda en la escuela”.
Rosalía preguntó. “¿No puedes quedarte?”. Era más como una súplica.
Guillermo se giró y le explicó para que entendiera. “Ella es mi novia, debo estar ahí”.
Rosalía se quedó muda con lágrimas amenazando con salir, Guillermo tomó su teléfono y le dijo algo más, pero ella solo asintió en silencio obedeciendo, él salió de la habitación dejando el lugar en un silencio abrumador, Rosalía se aferró a sus piernas abrazándose y lloró incontrolablemente.
Fin del Recuerdo de Rosalía…
……………………..