REINA DE HIELO. CAPÍTULO 90. Un hombre sentimental

Solo escucho la puerta cerrarse y una respuesta tan lejana como apresurada.

—¡Mejor tres cobardes vivos que tres valientes muertos! —grita mi padre—. ¡Y se nos acabó el Agua bendita! ¡Yo sabía que algo se nos olvidaba!

Me giro hacia Viktoi y sé que debo parecerme a Hades con el fueguito azul sobre la cabeza.

—¿Estás completamente estúpido o solo estás haciendo una audición para mártir del año? —le digo apenas nos quedamos solos, porque no puedo creer que se haya escapado de la casa para venir a hacer planes con estos cómplices, vendidos, traidores...

Viktor suspira, pero no se ve arrepentido. Tiene esa expresión del hombre que cree que acaba de salvar el mundo cuando lo único que ha hecho es meter el dedo en el avispero.

—Alma…

—No me "Alma". ¡Alma nada! —le interrumpo, apuntándolo con mi dedito acusador mientras con el otro señalo la agenda de trabajo sobre la mesa—. ¿Tú sabes lo que quieres hacer? ¿Provocar a Karin? ¿Organizar un e