REINA DE HIELO. CAPÍTULO 37. Una mujerzuela barata
REINA DE HIELO. CAPÍTULO 37. Una mujerzuela barata
Desde el primer momento en que esa mujer aparece, lo siento. Es como si la atmósfera cambiara de golpe. El aire se vuelve más denso, casi pegajoso. Los hombros de Viktor se tensan como si llevara una carga invisible, y Lars… Lars sonríe como quien acaba de lanzar una bomba en una sala de cristal.
Todo en esta escena grita "premeditación". Ella no está aquí por casualidad, no hay nada espontáneo en su postura ni en su mirada. Esa mujer fue traída con un propósito claro: joderle la noche a Viktor, y probablemente, arrastrarme a mí con él.
La mujer es delgada, alta, con una expresión arrogante que no necesita presentación. Luce un vestido caro, demasiado ceñido para un evento corporativo, y un peinado que grita esfuerzo. Se planta frente a nosotros sin saludar, sin rodeos, sin educación. Solo abre la boca y lanza su reclamo sin filtros. Pero lo que realmente me deja helada es que se crea con derecho a reclamar.
—¡¿Trajiste a una mujer a