Pov: Elizabeth
Acaricio su mano que está aun vendada y lo miro chocandome con sus ojos que se ven más miel que verdes.
— Estás hermosa — sonrío apoyando mi mentón en su pecho.
— No deberíamos tentar a la suerte — Sonríe de lado y acomoda mi cabello.
— Lo sé, pero no quiero dejarte, siento que si salgo de aquí, todo volverá para atrás, me asusta perderte de nuevo y solo quisiera ser libre para dormir contigo sin miedo a que nos atrapen — me incorporo y lo beso.
— No podemos Alex, no podemos — Asiente y corresponde mi beso acariciando mi cuerpo.
— De verdad que estás hermosa Beth — sonrío ante sus palabras que hacen que mi pecho se hinche de emoción.
— Vos estás... diferente, tenes más barba que antes, más... — toco su pecho — Más musculos — se carcajea.
— Solo un poco, el trabajo me obliga a mantenerme en forma — suspiro porque recordar su trabajo me hace recordar muchas cosas.
— Creo que mejor debes irte a tu habitación, puede llegar Lia y... — Me levanto de la cama para buscar mi ro