Nuevamente estoy expuesta y sin alguien que me ayude, por lo que, no tengo otra opción que agarrar el teléfono y contestar la llamada amenazante, porque dudo que la insistencia sea para un simple saludo.
‘Seguramente va a hacerme pasar un infierno.’ Me digo mentalmente.— ¿Hola?— Te lo dije, ¿te acuerdas?— Señor… Hawking.— Nunca me llamó la atención que me vieras como tu suegro, porque a diferencia de la madre de Eydran, nunca creí posible que una simple humana fuera la pareja destinada de mi hijo.‘No me quiere en la vida de su hijo, así que, quien puede ser una amenaza para mi vida es este hombre. Así que, no puedo darme el lujo de hacerlo enojar.’ Me digo mentalmente.— Señor Hawking…— Mi hijo me ha dicho que quiere divorciarse de ti y ahora estoy en medio de una celebración que es