Si ya estaba sintiéndome mal, ahora que conozco que Marcus tampoco es humano, siento que en mi vida pasada yo concebí a Hitler o algo así de terrible, porque solo eso podría justificar porque me va tan mal en cada cosa que hago.
‘Es que cuando Dios dijo que hicieran la fila de la mala suerte, yo me ofrecí como voluntaria para que todos tuvieran una buena vida.’ Me quejo mentalmente mientras el anciano me ayuda a sentarme cuando ve que me tambaleo.— Necesitas calmarte un poco o podría sucederte algo terrible. — dice el anciano.— ¿Qué otra cosa podría pasarme tan terrible si mi vida es un completo caos? No solo es un paramilitar, si no que, no es humano. Ese hombre va a asesinarme. — digo temblando.— Tranquila, nosotros lo hemos tenido alejados. — dice el anciano.— ¿Nosotros?— Sabes que él no hace las cosas solo.