—Tengo celos de Anastasia White.
Marcus levantó una ceja y noté una ligera curva en sus labios, como si le resultara divertido lo que decía. Estábamos ahora en nuestra cama, y no pude evitar abrazarlo con fuerza porque extrañaba tenerlo a mi lado, listo para dormir conmigo.
—¿Por qué? Ella no significa nada para mí —dijo Marcus, besándome la frente.
Fruncí el ceño y lo miré de nuevo. —¡Siempre me dice que ustedes dos son cercanos! ¡Por eso me molesta su arrogancia! ¿Y por qué la eligieron como modelo del Halloway Hotel? —No podía contener mi frustración con esa mujer; todavía recordaba su actitud cuando fui al hotel.
Marcus se rió suavemente, y yo le lancé una mirada seria mientras le pellizcaba la cintura juguetonamente, haciéndolo encogerse, pero aún sonriendo.
—¡Oye! ¿Por qué me lastimas? ¡No hice nada! —dijo, todavía sonriendo.
—¡Te estás riendo de mí! ¿Por qué Anastasia? ¿Cuál es tu relación con ella? ¿Te está contactando todo el tiempo? —Lo bombardeé con preguntas. Ya habíamos h