Isabel Allende.
Si habia algo que a Artemisa le encantaba, no sabía si era la manera en cómo todo fluía naturalmente junto a él, nada se sentía forzado no tenía que meditar sobre como actuar; simplemente podía ser ella.
—Entonces...¿Cuál es tu mayor miedo?— le preguntó él, desde que habían salido de la empresa este habia comenzando con las típicas preguntas sobre sus preferencias personales.
La morena mordió su labio inferior habia muchas cosas a las cuales le tenía miedo si ahora se podía a enlistar cada una de ellas, pero respondió con las más obvia.
—Las agujas, verlas de