Oh – Wanda tomó la taza de café de la mano de Clemente ya que realmente sentía que le estaba haciendo falta – ¿se puede saber por qué hoy es el mejor día de tu vida? Por un momento pensé que ese día fue ayer – Wanda hizo un pequeño puchero fingiendo estar decepcionada.
-Es que ayer no me desperté contigo a mi lado – le dijo él mientras se acercaba a ella y dejaba un gran beso en su mejilla – sin embargo, debo admitir que anoche fue la mejor noche, nunca me imaginé que podía ser tan feliz – Clemente no mentía cuando decía esas cosas ya que realmente estaba feliz de estar con ella, sus ojos estaban radiantes por la alegría que sentía y Wanda podía notarlo.
Después de eso ambos desayunaron juntos y fue un momento realmente hermoso para los dos. No pasó mucho tiempo para que Wanda se despidiera de él y se marchara, los dos estaban tan felices de estar juntos que no querían separarse el uno del otro.
Mientras iba camino a su casa Wanda sintió una gran angustia en su corazón, ella realmente