Oficina del mayordomo Matt
El mayordomo Matt entró en su despacho. Detrás de él, un hombre con gafas lo siguió con paso tranquilo.
Su mirada era serena, pero transmitía una calidez educada. Curvó apenas los labios en una leve sonrisa al posar los ojos en Kylie. Ella le devolvió el gesto. Lo conocía: lo había visto varias veces en la casa trasera, aunque nunca habían hablado directamente. Brown había estado una vez en la misma habitación con él, y eso bastó para que lo recordara.
Kylie se enderezó en su asiento cuando el mayordomo Matt tomó lugar frente a ella. Ya se había secado las lágrimas. Por suerte, había tenido un breve momento antes de que él entrara, después de que el asistente Brown se marchara. Eso le permitió calmar la respiración.
El hombre de las gafas se sentó en un escritorio en la esquina y empezó a trabajar, como si siempre hubiera pertenecido allí. La mirada penetrante del mayordomo Matt obligó a Kylie a concentrarse por completo. Su expresión era indescifrable. Aunq