Capítulo 5. Cinco minutos.
No pude ver su mirada, ni él la mía, por las gafas de sol, pero estaba segura de que estaba igual de sorprendido que yo, se veía impecable y costoso, usando esa camisa blanca enrollada hasta los codos y con esos pantalones azules de vestir, usaba gafas de sol y el único accesorio que no le quedaba, era esa mujer que se sujetaba de su brazo.
—¡Papá ya viste quien está aquí!.
Yo sonreí y él tardó un poco en asimilar lo que pasaba, pero al final sonrió.
—Ya veo— dijo cuando llegó hasta nosotros. —Que sorpresa.
¡Mierda!, esa sonrisa, tenía ganas de lamberle la cara, recordarlo desnudo me hacía sentir cosquillas ahí…abajo, me lamí los labios y luego mordí mi labio inferior en un intento desesperado de contener todas las emociones dentro de mí.
—Señor Hamilton buenas tardes. Le presento a mi prometida, Wendy Jackson— Dijo Steven.
¿Qué?, ¿Qué dijo?. Yo tardé en procesar las palabras de mi novio, ¿Dijo prometida?.
—¿Prometida?—preguntó James no muy feliz, borró su sonrisa y sentí su mirada