Solo quería descubrir a Flyn. Pero fue algo que resultó completamente mal, como la mayoría de mis estúpidas ideas. Me infiltré a ese crucero únicamente para atraparlo con las manos en la masa, pero el que busca encuentra y yo lo encontré en brazos de otra mujer, alguien debió decirme que incluso encontraría lo que no buscaba, porque cuando hui de ahí me caí del barco junto con un malhumorado engreído y terminamos en una isla donde no podíamos salir, ahora solo nos queda esperar... y mientras tanto estamos perdidos, sin saber qué hacer.
Ler maisRetrocedí unos cuantos pasos, la suela de mis zapatos hacían un extraño crujido contra el suelo en el silencio del callejón, solté un suspiro intentando que el dolor de mi cuerpo no me desanimara, y miré hacia el muro que quería saltar; Si lograba cruzarlo, lograba mi objetivo; entrar al barco.
Tu puedes vamos.Necesitaba respuestas, atraparlo en el acto.Tomé aire y me impulsé hacia adelante corriendo y salté hacia el muro, mi cuerpo se estampó contra el frio concreto dejándome sin aliento, mis manos lograron aferrarse de la cima, sin embargo comenzaban a resbalarse.Joder.JODER.Mis uñas se incrustaron en los huecos de los ladrillos e ignorando el dolor; recargué mi peso en ellos hasta que logré elevarme y montar la mitad de mi cuerpo en el muro, ahora solo necesitaba elevar mi pie y…Mi cuerpo se desniveló y caí hacia el otro lado de cabeza, escuché el horrible crujir de una mesa ceder ante mi peso, mierda, había caído sobre una mesa de madera, me levanté con dificultad mirando a todos lados, parecía estar en el depósito del barco, habían muchas cosas amontonadas; sillas, mesas, utensilios, papeles y sobre todo; cajas.Pero por fin, estaba adentro.Me escabullí lejos de esa sala saliendo al pasillo oscuro y solitario, subí las escaleras saliendo a la luz absoluta y cegadora, había mucho movimiento, muchas personas vestidas de blanco con delantales y gorros caminaban de un lado a otro con bandejas, el olor a carne guisada drogó mis sentidos y me revolvió el estómago, no había comido nada y al parecer esta era la cocina.— ¿Qué haces aquí? —dijo una muchacha con uniforme blanco que me imaginaba era parte del personal.—Yo… Perdí —murmuré, aclaré mi garganta y aparenté parecer ofendida—, no sabía dónde…—Extranjeros… No. Puede. Estar. Aquí –comenzó a decir cada palabra como si así pudiera hablar otro idioma.—Baño, ¿está acá? —dije aguantando las ganas de reírme, que tontos podían ser algunos.La muchacha giró los ojos, negó con la cabeza y tomó mi mano para guiarme hacia la salida de la cocina donde quedaba un enorme restaurante atestado de personas riendo, gritando y pasándola bien con la música en vivo de una banda. La muchacha me señaló la puerta del baño y se dio media vuelta para marcharse.Bueno, eso fue más fácil de lo que creí.Ya estaba adentro, ahora solo me tocaba encontrar a Flyn.
Extra¿Qué pasó con Charlotte?Aparecí en el C.S.N, mi rostro con cables que conectaban a una maquina, el frio me entumecia los pies y tenia puesta una bata transparente que estaba segura dejaba ver mi trasero. La luz intensa aturdía mis ojos, supe desde ese instante que habia logrado salir de la isla, claro que luego me enteré que habia estado inconciente por más de cuatro meses –más que el tiempo que estuvo Marco- me dieron en estado de coma. Durante los meses que habia estado encerrada ahí supe que nadie sabía de mi existencia, las noticias me dieron por
EPILOGO.MARCORespiré el aire fresco de mi casa, las lagrimas se desbordaron de mis ojos y lloré como no habia hecho en meses. Mi padre y mi madre estaban conmigo, los policias se ocupaban de que la prensa y los curiosos no se acercaran a mí. La nueva muchacha de servicio se llevó las maletas que mis padres me habian dado cuando estuve en el C.S.N, me habian internado ahí durante tres meses; haciendome examenes de todo tipo (desde neurologicos hasta de mis uñas de los pies), las pesadillas eran frecuentes, veía diariamente a un psicologo pero no sentía que me ayudara lo suficiente, solo podía ver las bestias, los protervos y a Charlotte en mis sue&ntild
CHARLOTTEEscuché un fuerte gruñido y los gritos de los muchachos erizaron mi piel acelerando mi corazón, debía de ser el animal de la isla; la ultima criatura que habia quedado viva de su especie, tenía casi los mismos siglos de la isla, comía todo lo que tuviera carne. Maldición, odiaba poder saber todo acerca de toda la maldita isla.Los muchachos estaban en peligro, pero no podía ir con ellos, estaba reteniendo el amplia agua de mar para que no fluyera todavía y eso requería de todo mi esfuerzo porque era como sostener un auto que se encuentra en una montaña empinada con los meñiques; una misión casi impo
CHARLOTTEMis manos comenzaron a temblar, creo que caí en una especie de estado de Shock porque no podía despegar mis ojos del cadaver de Marco, era dificil de creer. Escuché que Julia murmuró algo, pero no le presté atención, ella me echó a un lado y comenzó a golpear con fuerza el pecho de Marco, iba a decirle que dejara de golpearlo; que le hacía daño, pero no me salían las palabras.-¡Haz lo tuyo Charlotte! –Gritó Julia–, ¡Haz la luz magica!Julia no paraba de golpear su pecho, limpié mis mejilla y lo volví a intentar, esta vez sentí más recepción, habia
MARCO Me levanté del asiento sintiendo mi corazón desenfrenado contra mi pecho, este era el avance, esto podría sacarnos de aquí. Nos acercamos a Julia, pero ella se dio media vuelta caminando de un lado a otro como una niña con la mejor muñeca barbie del colegio, sabia que tenia algo que nos interesaba a todos pero era incapaz de compartirlo.-Agente Miller –continuó Julia-, reportando desde el proyecto R, isla de Zen.-Dile lo que nos interesa Julia –dijo Charlotte-, deja el protocolo.“Agente Miller, reporte general” dijo la voz desde la pulsera parec&
CHARLOTTETomé la pulsera de otro cadáver casi con la necesidad de ser delicada y que no le doliera. Observando como el veneno lo consumia por completo, fruncí el ceño y coloqué la pulsera sobre el cadaver carcomido observando como se estremecia; casi como si quisiera volver a la vida, comenzó a secarse hasta volverse polvo.-Es el cobre –comprendí-, el cobre es lo unico que puede destruir el veneno.-¿Ahora sí explicarás algo que tenga sentido? –preguntó Marco, sus ojos verdes expectantes, mirándome casi con desesperación.-Creo que puedo e
Último capítulo