Carlota salió de la estación de policías cuando se topo de frente con el señor Davis, El hombre la miró de pies a cabeza, parecía querer eliminarla con la mirada, se detuvo de golpe, sabía que él iba a decirle a su hija que la había visto en ese lugar.
Respiro profundamente y continuó avanzando, pasó al lado del hombre él la tomó del brazo con fuerza y la obligo a detenerse, se mordió los labios con nerviosismo.
__Es extraño verte por acá, no me digas que viniste a clavarle el puñal como las demás Carlota.
Guardo silencio por unos segundos, al parecer era un vidente o algo parecido, era mejor evitar los problemas.
__Vine para saber de ella, estoy realmente preocupada pero usted parece estar muy tranquilo con lo que sucede.
El hombre le mostró una sonrisa y negó con la cabeza, el conocía a Carlota mejor que nadie y sabía cuando estaba mintiendo.
__Deberías de aprender a mentir, además ninguna de las dos es mi hija, poco me importa si algo le sucede, tengo una póliza de vida a su nombr