CAPÍTULO 30. ¿ENTIENDES LO QUE ESO SIGNIFICA?

Guido sacudió la mano mientras lanzaba un juramento. Él tenía los malditos nudillos casi destrozados y Leo todavía seguía en pie. Pero si tenía que darle con un bate por la cabeza para detenerlo, entonces eso exactamente era lo que iba a hacer.

—¡Siéntate de una puta vez! —dijo empujándolo contra uno de los sofás de la suite donde se quedaba en Génova, y lo vio caer pesadamente, quedándose quieto por algunos segundos.

Guido había tenido que arrastrarlo literalmente para llevárselo del muelle, porque el primer instinto de Leo había sido de veras ahogar a aquella señora con sus propias manos. Se dijo que tenía suerte de que el alcohol hubiera empezado a hacer su efecto, porque en circunstancias normales, absolutamente nada ni nadie hubiera conseguido impedirle que fuera a reclamarle a Alessandro y a Gaia a esa hora de la madrugad

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo