Antonio llegó al departamento de Eduardo, golpeo la puerta, pero nadie salió, después insistir varias veces se dio por vencido y se fue -deben estar cenando afuera- se dijo. Abatido llegó a la mansión y se encontró con su madre Estela que lo estaba esperando
-Hijo, Benjamín ya está durmiendo, ven siéntate-
Antonio cansado, triste, sin comer mucho en todo el día y sin ninguna gana de casarse con Paula se sentó al lado de su madre y por primera vez conversaron de madre a hijo.
-Mamá no sé que voy a hacer, no amo a Paula, me irrita de solo verla, pero ya perdí a Kate y no quiero perder a Benjamín-
-Hijo ¿tú amas a Kate?-
-Mucho mamá, incluso estaba dispuesto a hacerme cargo del bebé, pese a que es hijo de Eduardo-
-Estoy segura de que ella también te quiere, cuando estabas desaparecido ella lo pasó muy mal, yo no entendía a quien iba a buscar tanto a la selva, ella se iba todos los fines de semana a buscarte y llegaba apenada porque no habían noticias tuyas, Eduardo algunas veces la acom