Capítulo 99
El sonido de las llantas mojadas deteniéndose frente a la residencia rompió momentáneamente el silencio de la noche. Dante descendió del coche sin importarle que la lluvia seguía cayendo sin tregua. Sus pasos pesados lo condujeron hacia la entrada, con el cuerpo empapado de pies a cabeza, pero con u