Capítulo 83: Line no está.
—Ya no quiero ser tu amiga —susurró Loreline con voz temblorosa, con lágrimas rodando por sus mejillas. Su cabello castaño, enmarcado por una corona de tristeza, se agitaba mientras empujaba con desesperación a Juan Pablo. Con cada pisada apresurada hacia mi lado, buscaba refugio y protección—. Te dije que a mi mamá le daba miedo entrar a los cuartos oscuros y, a pesar de eso, tú decidiste encerrarla allí —le gritó a Juan Pablo.
Mi corazón se encogió al ver el sufrimiento en el rostro de Loreline. Sus ojos estaban llenos de angustia, enmarcados por largas pestañas, eran espejos de la traición que había presenciado. No pude evitar sentir rabia hacia Juan Pablo, quien parecía ahogarse en un mar de lágrimas. Era evidente que había sido manipulado por esa maldita mujer.
—Ve adentro con tus abuelos —le dije a Loreline, tratando de calmarla, aunque mi enojo resonaba en mis palabras.
Loreline asintió, dando una última mirada llena de resentimiento hacia Juan Pablo antes de marcharse, molesta