Capítulo 42
Las dos semanas se pasaron tan rápido que a Estela no le dio ni tiempo de asimilar lo que ocurría. Su estómago comenzaba a verse inflamado, y aunque todavía no confirmaba públicamente su embarazo, las sospechas existían. Sus pies se le hincharon tanto que, horas antes de la celebración de compromiso con su hijo, tuvo que ir a comprarse un nuevo par de zapatos.

―El glamour no es nada en estos momentos ―dijo para sí, luego de elegir un par de zapatos sin tacón, cerrados en color crema.

Cuando llegó a su casa, subió a recostarse en la cama debido a su dolor de espalda. Horas más tarde, con los ojos hinchados y entre bostezos, le mostró su atuendo a su hijo en medio de la sala.

―Te ves hermosa, mamá ―le dijo Iván, y sintió el corazón conmovido al ver a su madre, cansada pero radiante, lista para su fiesta de compromiso―. Gracias por estar conmigo, a pesar de no estar de acuerdo.

Estela se limpió las lágrimas.

―Sabes que siempre contarás con nosotros. ―Se acercó a él y le dio un fuerte abra
Svaqq16

Gracias por leer. Sus cometarios me dan mucho ánimo para seguir escribiendo. Me apuro para leernos en unos 40 minutos. Gracias :)

| 7
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App