El CEO estaba sin palabras, su hijo era práctico, le importaba que las actividades que tenía fueran de enseñanza para el o simplemente no le interesaba
— Drago tienes que entender que Andrés es diferente a ti, el es un niño que si le gustan las actividades comunes y las disfruta, ¿no debemos darle lo que lo hace feliz?
— No, debemos darle lo que lo ayude a ser mejor, él será el CEO de las empresas de sus padres, tiene que estar a la altura, yo estaré ocupado dirigiendo el imperio Ferreira, no podré estar ayudándolo a dirigir la compañía Alcántara, eso tiene que hacerlo el mismo, a menos de que quieras ir tú a trabajar con él
— Es solo un niño, solo se está divirtiendo un poco
— Bueno, me avisas cuando podemos a ir a inscribirnos a las clases de artes marciales y a caligrafía, cuando crezca un poco más quiero ir al Japón a pasar una temporada, hay muchas cosas de esa cultura que me interesan — dicho eso el niño salió del despacho, ya había aclarado sus dudas así que no había nada más