La noche paso en un agradable ambiente acompañado de rebanadas de pizza y una agradable charla, la cual a veces tocaba temas de trabajo y otra solo algún tema casual. Dante se retiró a la medianoche, pero prometió pasar el día siguiente con ellas para compensar su ausencia.
Al día siguiente Isabella y Elizabeth despertaron temprano para seguir paseando por el centro de la ciudad y seguir buscando locales en renta o venta, donde lo marcarían en su mapa e igual llevaban una libreta para apuntar los datos de contacto de esos lugares, justo cuando estaban por salir tocaron la puerta de su habitación dándole paso a Dante, quien llegó puntual para acompañarlas.
Aunque al ingresar a la habitación, el pelinegro miro de forma curiosa que sus acompañantes se estaban colocando unas pelucas para completar su atuendo para salir de paseo.
- Am… ¿y porque el cosplay? – pregunto divertido Dante.
- Por que por ahora Isabella Robinson no necesita debe estar en este lugar – indico divertida la ahora pel