POV Isabel
Yo no podía estar más feliz, el chico del que locamente me había enamorado sentía lo mismo por mí, había dejado de lado todos esos pensamientos de nuestra diferencia de edad, de que era el hijo de mis jefes, él me haba demostrado que no le importaban las clases sociales y yo no podía estar más contenta.
-Isabel, ¿Quieres ser mi...?- Estaba a punto de preguntarme eso que tanto había querido escuchar, hasta que se vio interrumpido por una voz femenina a nuestra espalda.
No puede ser, era Natalie.
-¡¿Camilo?!- Preguntó enojada acercándose a paso rápido hacia nosotros.
En ese momento yo me puse pálida, Camilo parecía verse relajado, pero al contrario de él, yo me puse muy nerviosa, abrí los ojos como platos y me puse de pie de inmediato separándome un poco de él. Camilo se puso de pie a mi lado y me abrazo por la cintura protectoramente.
-¿Me puedes explicar que carajos estás haciendo aquí con la cocinera de la casa de tus padres?- Preguntó furiosa.
-No tengo porque darte expli