Pov Samanta
¡No hay hogar, como el hogar! Dije acostándome en el sofá y cerrando mis ojitos, sonreí al sentir las babas de Ramón por toda mi cara.
- ¿Me extrañaste pequeño? ¡Yo sé que sí! — dije acariciando a Ramón, el no dejaba de mover su cola y de llenarme la cara de babas.
Angie se acercó donde estábamos y cargo a Ramón, Angie le daba besos a Ramón y no dejaba de abrazarlo.
- Creo que estoy celosa de Ramón — Le dije haciendo un puchero, Angie se río y se sentó a mi lado en el sofá.
- ¿Y cómo porque estás celosa de nuestro hijo perruno? — Angie me dijo con una gran sonrisa.
- Porque mi amor a mí no me da cariñito — Le dije haciendo voz de bebé.
- ¡Ay mi bebé quiere cariñito!
- ¡Chii