CAPITULO XI: LA PRINCESA

Ya había bajado un poco todo el estrés del preservativo, ya Anett se encontraba en la habitación que el rey y Isaac habían planeado y era un nuevo día Clarissa ya mucho más calmada salió de la habitación donde se encontraba era una muy linda mañana y salió a tomar un poco de aire y a contemplar a los hermosos pajaritos cuando de repente escucha unos pasos cercanos, no sabía de dónde venían los pasos pero si sabía que cada vez se acercaban más, esto debido a que se escuchaban cada vez más fuerte, a los pocos segundos sale Isaac Bonhomme le sonríe a Clarissa y se sienta a su lado.

— Buen día Clarissa ¿Qué tal amaneció?

— Muy bien ¿Y tú? – Le respondió. –

— Bien, muy bien, aún un poco cansado de todo lo que hice ayer ¿Y usted qué tal su día de ayer? ¿Qué hizo?

— Pues realmente no mucho, casi todo el día en el hospital con mi niña.

— Ahh super, una pregunta ¿Cuándo llamó mi atención por qué algo sucedía afuera a dónde fue usted?

Clarissa al escuchar esto comenzó a