Capítulo 82: Luna de Miel.
Un oasis Costero y la Luna de Miel en Portugal, llegó.
El viernes por la mañana, Cynthia y Mathias dejaron a las niñas con los abuelos en la Hacienda y emprendieron su viaje hacia el sur de Portugal. El coche se llenó de la emoción de la aventura, la música suave y la complicidad de los recién casados. Habían elegido un destino que prometía serenidad y descubrimiento. Un pequeño pueblo costero en el Algarve occidental, lejos de las multitudes, conocido por sus playas salvajes y sus acantilados dorados.
A su llegada, el hotel rural era un remanso de paz. Una antigua casa restaurada con paredes encaladas, detalles rústicos y una piscina infinita que se fundía con el horizonte atlántico. Su habitación ofrecía vistas directas al mar, y el sonido de las olas rompiendo contra los acantilados se convirtió en la banda sonora de su estancia.
Días de sol, mar e historias antiguas era lo que les esperaba.
Los días siguientes fueron un torbellino de exploración y conexión. Pasaron las mañanas des