Cynthia colgó el teléfono, su mente girando. Andrea. La mujer de las fotos. La conexión de Daniel con otra vida. La oferta de —información— era intrigante y perturbadora a la vez. ¿Qué podría tener ella que Daniel hubiera ocultado con tanto celo? ¿Y por qué ahora?

Llamó a Laura de inmediato, explicando la conversación con Andrea. Laura, siempre pragmática, vio el potencial.

—Esto podría ser muy útil, Cynthia —dijo Laura—. Si Andrea tiene pruebas de algo ilegal o de cualquier otra irregularidad grave de Daniel, podría anular su apelación e incluso abrirnos puertas para más acciones legales. Pero ten cautela. No la veas sola. Mathias o yo debemos estar contigo. Es probable que Daniel ya sepa que ella fue la que le envió la información anónima que recibiste.

Acordaron que Cynthia y Mathias se reunirían con Andrea al día siguiente por la tarde, en un café neutral y concurrido. Cynthia se sentía nerviosa, pero también impulsada por una curiosidad inquebrantable. Necesitaba saber la verdad,