Al abrir mis ojos veo que aun no entra luz por la ventana que tengo enfrente. Me levanto de la cama quedando sentada en una orilla, tomo mi celular de la mesilla y veo que son las 2:34am. Mi Ashton que se encuentra dormido como un ángel.

Me levanto de la cama y camino para la ventana. Al abrirla me entra la brisa del mar, y el olor a la playa me hace sentir mas feliz. Miro la luna que se ve hermosa hoy. ¿Han visto la playa de noche? Pues les digo que es un placer verla. Es tan, pero tan hermosa.

La felicidad que estoy sintiendo ahora mismo es inquietante. Me inquieta porque se que ya no puedo controlarla. Se que ya no estoy en mis manos, ahora estoy en las manos de Ashton, y el está en las mías. Por un lado no está bien, pero por el otro lado es bonito tener a una persona así a tu lado.

Es increíble la cantidad de emociones que Ashton me ha enseñado en solo dos años. Le agradezco en lo profundo de mi corazón que haya aparecido en mi vida, y aun mas por quedarse.

—¿Qué tanto piensa