Elisa
Su media sonrisa resplandecía convencido de lo que decía, ¿ir con Carlos? De solo pensarlo mi corazón se aceleraba y me ponía nerviosa.
- Está bien me has convencido - Digo y su sonrisa se amplía un poco más, me sorprendía pues cuando lo conocí no creí que fuera capaz de siquiera sonreír y aquí estaba volviéndome loca cada vez que lo hacía - la graduación es a las siete pero no tienes que estar allí en realidad el baile es a las diez
- estaré puntual en ambas, dime tienes portátil en casa-
- e si tengo una- que sinceramente poco usaba
- qué te parece si te paso el programa de diseño a ella y así le avanzas cuando puedas- seguía teniendo muchísimo trabajo
- me parece bien y te lo envío en cuanto lo tenga para que lo mires- me miro un momento antes de volver la vista al camino.
- No quiero que te presiones, no tiene que estar listo para el lunes, solo avanzado ya sabes para avanzar la construcción lo que es la decoración la puedes dejar para entre semana-
- Está bien, pero