Me echo un ultimo vistazo antes de subir al auto con papá, me inclino hacia delante pasando entre ellos dos para prender el estéreo.
—No podemos viajar en silencio? —reclama mamá.
Papá me hace un gesto en retrovisor cuando escuchó cesar la música.
—Hoy es un gran día—dice mamá girándose en su asiento hacia mi—te mereces esto—dice extendiéndome una pequeña cajita plateada. Al abrirla me encuentro con la cadena que el abuelo le había obsequiado en sus quince.
—Mamá...—digo
—Tu abuelo también estaría emocionado—me dice con u