Capítulo 69. Furia rosada.
Jacob.
Después de ver cómo ganaba en todas y cada una de las pistas, Kell se despidió de Dalila.
*Debo partir, mi amado ángel.
-¿A donde vas?- Preguntó curiosa.
*Se me ha asignado la importante tarea de patrullar el lado oeste del territorio.
-¡Oh!... claro. Supongo que ya te he robado demasiado tiempo y debes de seguir con tus obligaciones. - Dijo en tono abatido. Luego recompuso su cara en una sonrisa y abrazó tiernamente a Kell. - Gracias por pasar el rato conmigo.
*No estes triste, mi dulce amor. Solamente debo irme por media hora. Regresaré.
-¿En serio? ¡Genial! - Dijo emocionada. - ¿Sabes? Podría morder a algunos guardias y exploradores para que puedan hacer patrullaje por ti y descanses de la explotación que de seguro vives con el idiota.
*No te falta razón, mi precioso ángel. El humano idiota me trata mal y hay noches que no duermo; sin embargo, nunca te pediría o te dejaría que te agotaras solo para darme un pequeño respiro. No te preocupes, la separación será corta... en ser