Capítulo 59: Tormenta de arena.
Meses después de aquella macabra llamada, Aisha observaba a sus hijos dormir en sus cunas ajenos a todo el mal que había en el mundo.
-Son tan pequeños Nader, me da pesar dejarlos solos. -murmuró Aisha y su esposo la abrazó para reconfortarla.
-Solo será por unas horas, tenemos una reunión importante y no podemos faltar.-recordó Nader, pero su esposa no se veía muy convencida de dejar a sus hijos.-Los niños estarán bien, Kalah estará cuidando de ellos y el palacio es totalmente seguro.
Seguros de que sus hijos estarían bien, Aisha y Nader se marcharon del palacio. Mientras tanto Úrsula observaba la caravana de autos que seguía a su hijo abandonar el palacio. La venganza es un plato que se come frío, y ella dejó enfriarse el suyo durante meses, pero finalmente estaba lista para devorarlo, y sentir una alta dosis de placer en el proceso.
-Eres un principito muy rebelde y llorón.-Kalah jugaba con Nasser haciendo el menor ruido posible para no despertar a Ayser. -Veo que serás el niño cap